November 21, 2008

Buscando la Cara del Señor

La sensibilidad de las cartas de los estudiantes resulta un buen ejemplo

A principios de este año lectivo recibí cartas de los estudiantes del sexto, séptimo y octavo grado de la escuela St. Mary en Aurora.

Los alumnos del séptimo y octavo grado me habían escrito antes cuando se enteraron de mi cáncer la pasada primavera.

La intención de sus cartas más recientes era contarme lo contentos que estaban por la remisión de mi padecimiento y que continuaban rezando por mí. También pusieron de manifiesto que rezaban a diario por las vocaciones al sacerdocio y la vida religiosa.

Varios de los estudiantes del séptimo grado dijeron que esperaban con ansias recibir el sacramento de la confirmación el próximo 3 de mayo, durante la celebración del aniversario de los 175 años de la arquidiócesis en el estadio Lucas Oil.

Los alumnos del octavo grado esperaban con expectación verme durante la confirmación el domingo 12 de octubre.

Lamento no haber podido confirmarlos tanto a ellos como a otros. He tenido que contar con la colaboración de sustitutos que me relevaron durante las confirmaciones del otoño ya que la recuperación de los efectos producidos por la quimioterapia y la radiación ha sido lenta.

Disfruto las cartas de nuestros jóvenes. Me encantan las cosas que desean compartir conmigo. He aquí algunos ejemplos.

En un testimonio de fe lleno de espíritu, Adam escribió: “¡Hola!” ¿Sabía que rezamos por usted todos los días? Las oraciones doce personas [alumnos de sexto grado] por un hombre tan especial como usted seguramente funcionarán. Dios puede obrar en formas misteriosas. También rezamos por las buenas vocaciones al sacerdocio. …”

Josh escribió: “Mi clase reza por su recuperación y yo creo ha funcionado. … Me alegra mucho que se sienta mejor y que siga siendo nuestro obispo.”

Hanna escribió: “Dios es una parte importante de mi vida. Me ha ayudado en todo momento. Seguiré rezando por usted y espero que usted rece por nosotros también.”

Algunos estudiantes hablan de su amor y su preocupación por los demás. Sara escribió: “Amo a mi familia, a pesar de que mis hermanos Ben y Alex son un fastidio. También quiero a mis amigos. Son un poco tontillos como yo, pero los quiero. Usted está en nuestras oraciones. ¡Que Dios lo bendiga!”

Brad escribió: “La mamá de uno de mis amigos está en el hospital. No está nada bien. Tal vez usted pudiera rezar por ella. … Ella también tiene cáncer. Hoy fue el cumpleaños de mi mejor amigo.”

El cáncer también está presente en los pensamientos de Jeremy: “¿Sabe qué es extraño? Mis dos abuelos también tuvieron cáncer. Uno de ellos murió, el otro goza de buena salud. Creo que mi tío abuelo tiene cáncer, pero nadie más. Creo que esas son todas las personas que conozco que tengan cáncer.”

La mayoría de los estudiantes habló sobre su participación en los deportes. En su carta, Jeremy proseguía: “Me gusta practicar deportes, tales como fútbol, béisbol y baloncesto. También hago Tai-Kwan-Do, natación y percusión. Considero que dos de ellos son deportes, pero no sé si usted también.”

Los Colts y los Bengals recibieron amplia cobertura. Johnathon comentó: “Una de las razones por las que me gusta tanto St. Mary es que nuestro director es un gran fanático de los Colts, como yo. … Por favor recuérdelo en sus oraciones, al igual que a nosotros.”

Luke escribió: “Mis deportes favoritos son fútbol y lucha libre. Pero me gusta ver todos los deportes, desde fútbol americano hasta NASCAR. Mi equipo favorito son los Bengals de Cincinnati. Sé que tal vez los Colts sean su equipo favorito, pero no se lo tomaré en cuenta. Que Dios lo bendiga y rezo por usted.”

Jonathon habla acerca de los beneficios de estar en el octavo grado: “Estoy en octavo grado. ¡Es estupendo estar en octavo grado! Somos los primeros de la fila en el almuerzo y los viernes hacemos diligencias para nuestra maestra. También participamos más en la Misa. En cada Misa de la escuela cuatro de nosotros recogemos la limosna.”

La comida fue un tema de conversación para un par de estudiantes. Leonardo escribió: “¿Qué tipo de comida le gusta comer? Mi comida favorita es la mexicana. ¿Alguna vez ha oído sobre el mole? Es muy bueno. Lleva los siguientes ingredientes: chocolate, pimientos tostados, migas de pan tostado, agua y nueces. A pesar de que suena raro, es delicioso. Bien, espero que se sienta mejor.”

Angelo escribió: “Mi comida favorita son las alitas de pollo picantes. Me encanta cuando están tan picantes que sacan lágrimas de los ojos. … No veo la hora de escribirle otra vez. Continuaremos rezando por usted.”

Las observaciones de Adam parecen representar a todos los escritores de cartas. “La gente me dice que soy verdaderamente dedicado e inventivo. Me gusta hacer reír a la gente y lo hago muy bien. Que Dios lo bendiga, arzobispo Daniel.”

La proporción de alegría de corazón y de sensibilidad nos da un buen ejemplo a todos, ¡especialmente durante este noviembre gris! †

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